El origen del mundo (o cómo cada día estamos más tontos)

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Esta tira tiene ya seis años. Estaba realizando un curso donde me pedían crear una tira de humor gráfico en tres viñetas. Por aquel entonces, aparecía en todos los medios la polémica que se había montado en torno a la campaña de difusión del semestre de Presidencia europea de Austria. El otro cartel me puede parecer algo más discutible, pero este que apareció en todos los medios como ejemplo de pornografía es, simplemente, brillante:

Así que me pareció un tema idóneo para mi tira cómica (tristemente, el profesor no la entendió porque no conocía la obra de Courbet, pero ese es otro tema). 

Hoy me entero de una polémica, si cabe, más tonta aún: la desplegada entorno al cartel del CDN para la nueva versión de Yerma que se va a representar estos días. Un cartel igualmente brillante lleno de semántica y que transmite con total fidelidad lo que Lorca quiso contarnos en su obra. Fernando J. López lo expresa a la perfección en su post Desnudos del blog Culturamás: ¿por qué estos escándalos ante el simple desnudo del cuerpo humano en una época donde se toleran imágenes de masacres y mutilaciones sin venir a cuento? No puedo estar más de acuerdo con él (as usual).

El problema, me temo, es la falta de cultura de aquellos que parecen pertenecer a la cofradía de la perpetua indignación. Evidentemente, si uno no ha leído la obra de Lorca, si no es capaz de percibir el sutil mensaje que nos lleva del cartel a esa yerma mujer lorquiana, es posible que la representación de una vagina le parezca una modernez sin sentido. Como decía Ortega en su siempre vigente La deshumanización del arte, el espectador actual, inculto por lo general, tiende a ofenderse ante el arte moderno debido a que pone de manifiesto su incapacidad para entenderlo. Esto es, ante los artistas modernos "cabe hacer dos cosas: o fusilarlos o esforzarse en comprenderlos". Y como el saber hoy en día cada vez es más utilitario (y por tanto más inculto), me da la sensación que la primera de las opciones en lugar de decrecer -tal y como cabría esperar en un mundo donde jamás ha sido más fácil y gratuito acceder a todo tipo de información- crece cada día con más brío.

Indignantes -por degradantes, insensibles y de mal gusto- son estas "tiras" que la Sociedad Española de Obstreticia y Ginecología difunde sin ningún pudor en su gaceta. Pero esto, como es pura simpleza mental y no requiere esfuerzo para ser entendido, no es considerado como censurable por los mandriles machistas de costumbre.

Es por todo esto que hoy he decidido rescatar una tira que hice como simple ejercicio hace ya seis años además de "traicionar" el espíritu de este blog de naturaleza parca en palabras con una parrafada más digna de mi otra casa. En fin, ya que hablamos de ella, me despido con un sean (más que nunca) curiosos y felices ;-)