24.2.12

(Re)flexiones

Pero tampoco le costó demasiado encontrar nuevas torturas y recuperar la ventaja arrebatada. Ella que, antaño, operaba con armas varoniles, se replegó hacia los recursos de una naturaleza femenina a estrenar y lista para servir.
Los niños terribles, Jean Cocteau, 1929.

No hay comentarios: